¿Qué es el Trainspotting?
El «Train Spotting«, traducido como la observación de trenes, es una afición basada en la recopilación y recogida de observaciones precisas de trenes. Un observador de trenes, un «train spotter«, se suele recoger información sobre cierto tipo de trenes en particular, una empresa ferroviaria concreta, horarios, objetos pertenecientes al mundo ferroviario, etc. Una vez recogidos todos los “spots” posibles (anotaciones o información concreta), los movimientos de los trenes se comparten en la comunidad de fans de trenes.
El sector ferroviario es muy amplio, por lo que la mayoría de los seguidores eligen un área de interés y se centran en él. Los temas de interés principales son:
- Locomotoras
- Fotografía
- Vías, puentes, estaciones y túneles
- Historia
- Colección de horarios
- Arte y/o arquitectura
- Preservación/restauración
- Operaciones
Debido a los niveles de seguridad actuales, en la mayoría de países se ha convertido en un hobby mal visto y difícil de practicar.
Jóvenes observadores tomando notas. Fuente: The Northern Echo
¿Qué se utiliza para realizar este hobby?
El “trainspotting” necesita algunos ingredientes. La paciencia es el primero de ellos, y los aficionados suelen llevar un libro donde anotan o ilustran todo lo que han observado. También suelen llevar un cuaderno o una grabadora, donde dejan grabados todos sus estudios.
En algunos casos, los «train spotters» también fotografían trenes, aunque la ley cambia según el país y la ciudad. Por ejemplo, en Londres las fotos deben ser tomadas sin flash, y en España se necesita un permiso. En Norteamérica es ilegal por motivos de copyright.
En los últimos años, Internet ha adquirido un importante papel en el mundo del «trainspotting«. Los fans de este sector pueden publicar y compartir toda su información con la comunidad. Las páginas web permiten a los observadores el intercambio de información, referencias y otras anotaciones. Internet también ha hecho posible el trainspotting virtual, a través del estudio online de trenes.
Como hemos comentado, este hobby requiere mucha paciencia. De hecho es considerada como una actividad aburrida o inútil entre la gente no aficionada. Los trabajadores ferroviarios suelen considerar a estos fans una molestia, e incluso han sido señalados como “una amenaza de seguridad”. Sin embargo, la observación de trenes sigue siendo un hobby bastante popular con muchísimas web, revistas y otras publicaciones relacionadas. Los fans de trenes se defienden señalando que sus estudios son beneficiosos y útiles para el sistema ferroviario dado que alertan sobre los posibles problemas, previniendo así accidentes.
Los «train spotters» también son conocidos como “railfans”, aunque no es exactamente lo mismo dado que el segundo grupo no tiene que llevar a cabo la observación de trenes.
¿De dónde surgió la observación de trenes?
La historia del «trainspotting» surge en los años 40 de la mano de Ian Allan. Durante esta década Allan era un joven profesional en el departamento de RRPP en la estación de Waterloo (Londres), donde diariamente recibía un gran volumen de cartas provenientes de todo el país, donde le preguntaban los detalles de los distintos tipos de locomotoras y otros datos sobre el sistema ferroviario.
Con tan solo 19 años, decide en 1942 recolectar y lanzar toda la información en un libro: “ABC of Southern Locomotives” -el ABC de las Locomotoras del Sur-, que consistía en un libro de bolsillo con un sencillo índice de tipos de trenes y números de motor. Se vendieron 2.000 ejemplares nada más publicarse, así que a esta guía le siguieron otras cada vez más detalladas. Para 1950 ya se vendían al año un millón de guías de locomotoras.
Tras la publicación de la primera guía, el “trainspotting” se convierte en un hobby nacional y Allan crea su propia empresa editora, Ian Allan Publishing, que crece exitosamente con los años.
El término preferido de Allan “Locospotting” –observación de locomotoras- comienza como fenómeno en 1944, cuando varios adolescentes son detenidos en la estación de Tamworth (cerca de Birmingham). Y para enseñar seguridad a los observadores más jóvenes, Allan crea el “Club de observadores de locomotoras”.
En este vídeo podemos ver a los aficionados durante los años 50.